Monday, July 27, 2015

CAFE TACUBA




Anderson Clayton era un lugar agradable para trabajar.  Yo trabajaba en el departamento de contabilidad.  Mi jefe era un hombre de apellido alemán, Ehrlich... bueno, es lo que pensé siempre.  El contador general era una persona de Chiuahua... Era una persona que si veía que había trabajado mucho, porque como les digo, el trabajo estaba atrasadísimo, me daba la tarde o hasta un día... cosa que no le gustaba a mi jefe, pues me quería tener allí siempre.

Cuando después de comer llegaba a mi escritorio, los muchachos que eran como cuatro los que siempre iban a platicar conmigo, si seguían allí cuando él llegaba, los corría... ya váyanse a trabajar!!

Como parte de nuestras pebendas, íbamos a comer al Café Tacuba.   Nos ibamos caminando todos en bola, En la Clayton  conocí a Graciela, con la que tuve mucha amistad, durante muchos años.  La invité a que se uniera al grupo a ella y a Lucrecia, una amiga de Graciela, que entró al mismo tiempo, compañera del colegio, que medía fácil un metro noventa centímetros.  Graciela por el contrario era muy chaparrita... recuerdo que cuando íbamos por la calle las tres... se volteaban y decian... "tan buena la grande como la chiquita".... ese era el eslogan de la Coca Cola, porque por ese tiempo salió un envase más grande.

La comida en el Café Tacuba era todo un festín... el Café lo fundo un señor Mollinedo que era el dueño y ya era grande, tendría por aquellos años, 1955 como 70 años... de cabello blanco y muy amable.

Nuestro grupo era muy numeroso, entonces nos sentábamos en la parte de adentro, casi en la cocina, éramos sus consentidos, cuando era el santo o cumpleaños de alguien, le decia al cantinero... sírvanles una copa de vino a todos... podíamos pedir casi todo lo que quisiéramos, que el arroz con un huevo, que más guisado, en fin, mas consentidos no podíamos estar... al llegar ponian una canasta con bolillos recién horneados con mantequilla.

Tengo que decirles que empecé a subir de peso... asi que como no tenia mucho dinero para comprar vestidos más grandes, pues ni modo, a dieta... dejé de tomar refresco y comer pan con mantequilla y luego luego bajé a mi peso... 50 kilos.

Hace unos pocos años regresé a comer allí... no, para nada la comida de aquellos tiempos, ya es un restaurante como muy convencional... total, la verdad no me gustó.

Como el Café queda muy cerca de varios teatros... allí conocí a muchos artistas... a Dolores del Rio, a Arturo de Córdoba, a Fábregas, en fin a muchos, que ahorita no recuerdo.

Eran muy buenos tiempos, nos la pasábamos muy bien... y bueno, lo mejor es que aunque la comida costaba creo que  doce pesos, nosotros o por lo menos yo, pagaba  dos pesos con cincuenta centavos.

Nos regresábamos todos en bola, para bajar la comida y a trabajar a veces hasta las diez de la noche.

Regreso mañana o pasado mañana a seguir platicándoles mis choco aventuras.

Y no, Lizette... nunca me ha dado por entrar al edificio, pero la próxima vez, asi lo hare.  Me da gusto que me lean y dejen sus comentarios.



Friday, July 24, 2015

ANDERSON, CLAYTON and CO:

El día y hora fijado, llegué a la famosa "entrevista".  Llegué a un edificio muy bonito.se llamaba Cidosa.  Aunque el edificio sigue allí ya cambió su fachada... según ésto "moderna".   La verdad me gustaba mucho más antes.  Por dentro no se como sea, algun día que pase por allí, veré si puedo entrar.
Edificio Cidosa, acrónimo de la Compañía Industrial de Orizaba S.A., en 1924...!!!
El Edificio Cidosa, acrónimo de la Compañía Industrial de Orizaba S.A., fue construido por Paul Dubois y Fernando Marcón en 1924. Este inmueble aún existe, con la fachada remodelada, en la esquina de República de Uruguay e Isabel la Católica; del lado izquierdo se aprecia la barda del antiguo templo de San Agustín, que entonces estaba ocupado por la Biblioteca Nacional.
Imagen de Luis Márquez en el libro "Una ciudad imaginaria", de Louise Noelle y Lourdes Cruz.
En Google Maps: http://goo.gl/maps/lZG6n


 Es un edificio con un gran claro en su interior y alrededor son pasillos a donde se llegaban a las oficinas, la entrada de la compañia quedaba a un costado, sobre Rep. de Uruguay.

La oficina era grande y lleno de papeles,  encima de escritorios, folders y más folders y más papeles, el desorden hecho realidad...  lo primero que pensé es que alli no se hacía nada.

Me hicieron un examen de taquigrafía y mecanografía, lo pasé sin ningún trabajo y me dijeron que cuando podía empezar.

Les dije que primero tenía que renunciar en mi otro trabajo.

Total que llegué a trabajar en Anderson Clayton  a mediados de 1956.  Era una compañía dedicada a la compra y venta de algodón, recien llegada a la ciudad de México, anteriormente había estado en Matamoros, Tmps.

Poco a poco empezó a crecer, devorando a pequeñas compañias algodoneras.

Mucho trabajo y sobre todo que tenía que archivar todo ese papelerío que vi el primer día que llegué.. horror!

Monday, July 20, 2015

HERPES ii

Sigo con los toques eléctricos... pienso que nunca me dejarán, me dijo la doctora que siempre tendría ese virus molestando, pero que habría tiempo en que no lo sintiera y que de pronto un dia sin decir ni agua va, se presentarían nuevamente, pero en verdad  me temo que no haya esos períodos sin dolores.   

Desde a principios del año pasado en que me dio hepatitis por andar comiendo donde no debo,   

Dos meses de reposo absoluto, donde Somi se portó como una verdadera heorina, su papá también hizo su parte y yo pues queriendo levantarme, pero pensaba, todo el trabajo de ellos, los echaré por la borda y no es justo, asi que me estuve quieta.

Claro que no me dolia nada, pero también mi sobrina y ahijada Lili que estuvo monitoreándome desde Torreón,  estuvo al tanto... Lydia y Lizette, ni se digan, desde lejos me mandaban buenas vibras y me llamaban diario, lo mismo que mi mana Carmen.

Sus buenos deseos y muestras de cariño hicieron maravillas en mi estado de ánimo.

Pero después de ese incidente, quedé mal del estómago o no se de qué, total que a veces me sentia mal en la noche y la pasaba muy mal, es por eso que una vez después de eso, estando Lizette aqui, me llevó al doctor y cuando regresé, ya estaba una doctora que es la que me ha estado atendiendo. 

Bueno, asi las cosas, seguiré con mis choco aventuras, que para el caso despues de ésto ya todos las conocen porque se las he platicado.

Ya no me acuerdo en qué me quedé... que entré a trabajar a Pemex, que como no me gustó me salí.  Aqui debo hacer un paréntesis y decir que mi mamá me apoyó.

Entré a trabajar a H. Steele, era secretaria de un señor Cisteró... muy guapo y tenía a su amante en la misma oficina (qué raro) (sarcasmo).  Hablaban por teléfono por horas, todo mundo sabia, pero a ellos no les interesaba.  Un día llegó su esposa y no queren ni saber los ojos de muérete que me echaba. 

Seguro sabía del amorío de su marido y claro, pensó que era yo, pues como les digo yo era la secretaria.

Como ganaba muy poco, mi mamá recortaba anuncios de trabajos y me los daba.  Un día escribí a una dirección solicitando empleo.   

Si hubiera existido el mail, hubiera sido rápida la contestación,  Pero ni en sueños.

Un día me llaman y me dicen... hablamos de Anderson Clayton.. pensé:  y ahora, a mi también me van a seguir, porque mi papá no recibió dinero por lo que lo corrieron de Empalme?... miles de pensamientos en segundos pasaron por mi cabeza.  

Y me dicen... hablamos por su carta solicitando empleo y nos gustaría que viniera para hacerle una entrevista... ajá, pero cuánto pagan... cuánto quiere ganar y la cantidad que les dije les pareció correcta... creo que pedi 900 pesotes mensuales!!

Mañana le sigo.




Thursday, July 16, 2015

HERPES

La cosa es que no tengo perdón,  la pereza  se hace pesente cada cinco segundos.

Podría en esta ocasión echarle la culpa al herpes, pero la verdad es que ha estado duro, bueno, ya no siento lo duro sino lo tupido... a finales de marzo me empezó, o sea que ya llevo vBueno... la carios meses y como que ya se amarchantó conmigo, no quisiera decir que ya le gusté, pero asi parece.

Medicinas van y vienen y sigo con los dolores, que ya no son dolores como tales, Lydia me preguntaba al principio que si eran como dolores musculares... no,. nada parecido a ningún dolor o molestia que haya sentido antes.

Les digo que es como si el famoso Pac Man, anduviera comiéndome las entrañas, o toques eléctricos que es la mayoría de las veces que ahora siento.  Le digo a somi que a la mejor cuando ya no tenga nada, los voy a extrañar... NOOOOOOOOOOOO para nada!!.

Es curioso que cuando uno está sano, no toma uno en cuenta lo bien que trabaja el cuerpo, uno lo da por sentado, pero nada, debemos dar gracias día a dia que nos sentimos bien y no esperar a sentirnos mal para darnos cuenta del error que cometemos.

Hace unos años me dio herpes en la espalda, me duró cuando mucho dos semanas, no dolores, no nada y se me quitó fácilmente.

Esta vez empecé con dolores en las costillas del lado izquierdo.  Pensé que a la mejor algún órgano interno estaba inflamado y eso hacía que las costillas me dolieran.  Era un dolor fuerte y cuando me tocaba sentía un dolor peor.

Pasados unos días, me salieron ronchas y fue cuando supe que tenía herpes.  Lo malo fue que aunque tomé medicina, era una dosis minúscula para lo que necesitaba, asi que fue empeorando, hasta que fui a ver a una doctora, que ni siquiera fui a eso, sino a otra cosa muy distinta.

Cuando le dije, es que tengo herpes y me vio la cintura, casi se va de espaldas y exclamó... qué barbaridad, eso está muy feo, muy grave... aunque para esas fechas no tenía dolores, inclusive me peguntó que estaba tomando para el dolor y le dije que nada, que no me dolia... ahhhh pienso que en ese momento el herpes dijo:... ahhh no te duele, pues vas a ver lo que es bueno y ándale, que me empiezan los dolores aghhhhhhhhhhhhh... horribles, no se me quitaban con nada.

Realmente ahora no me dan tan fuerte, la cosa es que en la noche es cuando arrecian.  Eso tuvo complicaciones con otras cosas y bueno, no ha sido agradable... aunque ninguna enfermedad puede ser catalogada como "agradable".

Ahorita en este momento siento los "toques eléctricos" por dentro... como diría mi marido... "son muy bonitos".

Bueno, por hoy le dejo allí y en serio, ahora si me propongo venir si no diario, por lo menos cada dos dias... Es una promesa y pienso cumplirla... ya estuvo bien de flojera.

Como este blog lo escribo realmente para los hijos, quiero decirles que los quiero mucho!!