Saturday, October 20, 2012

Primer símbolo de Petróleos Mexicanos




Este era el logotipo de Petróleos Mexicanos... en todas las gasolinerías estaba, o en cualquier parte que hubiera cosas referentes a Pemex.

El charrito de Pemex como le decían a este personaje, siempre vestido de charro... yo lo conocí, lo veía casi diario, pues andaba paseándose por todas partes, sobre todo en el edificio.   Era una persona bajita de estatura,  yo creo que un poco más de un metro... con sus piernas como si se le hubiera perdido el caballo, se balanceaba al caminar y era una persona muy alegre, era de Salamanca.



No se si el personaje conocido como El Charrito Pemex fue concebido antes de entrar en operación la Refinería en Salamanca o fue que luego, siendo el personaje oriundo de Salamanca y con la Refinería ya en operación que se utilizó su imagen para promocionar los productos que Pemex elaboraba en las refinerías que funcionaban en aquella época: Atzcapotzalco, Poza Rica, Tampico y Minatitlán. Del Charrito Pemex queda solo su recuerdo, aunque, por más que he tratado de saber su nombre y algunos otros datos que aseguren que él era oriundo de Salamanca, no los he podido encontrar.




La estufa que se ve en el anuncio, es como la que tenía mi mamá en Valsequillo... usaba petróleo y olía la casa a eso precisamente... de vez en cuando se tapaba y ya no quería funcionar... entonces mi mamá la cogía y la aventaba muy enojada a media calle... en cosa de diez minutos, ya que se le pasaba un poco el enojo porque no prendía la dichosa estufa, iba por ella, pues es lo único que tenía para hacernos de comer.  La verdad, ahora que lo pienso, mi mamá no se si sufrió mucho con los utensilios de entonces, pues al no tener dinero, como siempre, no se podía tener cosas mejores...   las planchas que usaba en ese entonces, eran de metal... o sea había que ponerlas en la lumbre para que se calentara, tenía 2 asi que mientras usaba una, la otra se estaba calentando... y como eran de metal todas, tenía que tomarlas con un trapo para no quemarse... qué horror!! de verdad que qué valiente y tener que planchar la ropa de un papá y cuatro hijos y la suya pues no era tarea fácil... porque eso si, nunca andábamos sucios... bueno, quiero decir cuando salíamos de la casa, porque yo, pues con todo lo que hacía no creo que durara mucho tiempo limpia... qué tiempos aquellos, de verdad que ahora uno se queja... no, no vuelvo a quejarme cuando planche.




Se dice que el Charrito Pemex era el que promocionaba no todo lo que Pemex producía sino, específicamente el Petróleo Diáfano, es decir, el Queroseno, combustible que se utilizaba para las primeras estufas que existieron, con precios más accesibles y que no tenían la necesidad de usar gas, sino, precisamente el queroseno, también se usaba para la iluminación a través de unas lamparas que al modo de quinqué, de hecho el Quinqué desapareció poco a poco cuando se introdujo la lámpara de queroseno. "El petróleo diáfano, en 1948 se expendía en todo el país a 15 centavos el litro, que si se compara con los precios que tenían en ese tiempo las gasolinas: Mexolina, 45 centavos y Super Mexolina, 55 centavos, su costo representaba sólo una tercera parte, del combustible destinado para los automóviles".



Los quinqués de que habla la nota anterior, esos los usábamos en Empalme, pues no teníamos luz en una de las casas, que ya les platiqué también en su tiempo.

Lo que está en amarillo y las fotos las tomé de un blog que se llama El Señor del Hospital.


APENDICITIS.

Y en un momento de buena suerte, me dieron un contrato por tres meses en  Servicio Médico, era un departamento agradable, no mucha gente trabajaba allí... el jefe del departamento era un Dr. Barbabosa,    dueño de toros de lidia... de mucho renombre... era un doctor ya grande y amable con sus empleados.

Estando allí, un día al despertar no me sentí nada bien... me dolía muchísimo el estómago y le dije a mi abuelita que ya me iba a bañar para irme a trabajar... en ese momento me dijo, que trabajar ni qué nada, te quedas y ahorita le llamo al doctor para que venga a verte... (qué tiempos aquellos cuando llamabas al trabajo porque estabas enfermo y te mandaban al doctor... claro que si no estabas enfermo te iba muy mal)...  y yo le dije:  es que tengo mucho trabajo, tengo que ir.  Total que no me dejó y me dijo que me acostara,  la verdad es que me sentía tan mal que ya ni dije nada.

Me preguntó que quería de comer y le dije que caldo de pollo, lo hacía riquísimo, con arroz y verduras, como me gusta.   En eso llega mi tío Tomás y me dice.. y ahora? qué tienes, como recordarán mi tío Tomás era médico y que gracias a él que me consiguió una cama en el Hospital Infantil, todavía ando por aquí contanto mis choco-aventuras.   Si ese día no hubiera habido cama, me paso a morir, como dirían en Villahermosa... pero nuevamente como digo, por algo pasan las cosas... nadie muere la víspera, a menos que seas guajolote en vísperas de un cumpleaños o Navidad.

Bueno, cuando le dije a Tomás que estaba enferma y me vio comiendo me dijo... ajá, si como no, si estuviera enferma no estarías comiendo... porque enfermo que come y.... que el diablo que se lo crea.

Al rato llegó el doctor y me dijo que seguro había comido algo que me había hecho mal... me dio una medicina y se fue, pero como el dolor arreciaba, mi abuelita volvió a llamar y llegó otro doctor y dijo que era apendicitis... que me tenía que ir al hospital de inmediato.... que iba a mandar una ambulancia, no recuerdo haberme ido en ambulancia, no cómo me fui.  Total que llegó un doctor y me dijo... te vamos a hacer unos análisis, depende de como salgan, te operamos hoy en la noche y si no, mañana con toda calma, para que duermas bien.

Al rato regresó y me dijo, salieron bien, asi que mañana te operamos.... por cierto que el doctor estaba muy muy guapo!! 

Total, ya saben, llegaron muy temprano por mi, me llevaron al quirófano, me pusieron la máscara del ether, me dijeron que contara del diez para atrás, creo que no llegué al ocho cuando caí nuevamente en ese pozo negro y sin fondo ya familiar para mi, envuelta en ese olor tan peculiar.

Cuando desperté, me dolía todo el estómago... (lo bueno es que no lo tenía tan grande como ahora... si no, para qué les cuento)... con ganas inmensas de volver el estómago... abrí los ojos lista para quejarme, cuando veo a mi mamá sentada en una silla tejiendo... el sólo verla allí me sentí salvada y me volví a dormir.

Cuando llegó el doctor me dijo que por poco me iba a pasar Navidad al inframundo... pues la apéndice ya estaba reventada y por tal motivo me habían tenido que dejar una canalización.

Thursday, October 18, 2012

PEMEX

En aquel tiempo Petróleos Mexicanos estaba en Ave. Juárez... en el mismo lugar donde después estuvo un Conalep que se cayó con el terrible terremoto de 1985.  

Era un edificio muy bonito, de esos antiguos... con un gran patio central, de dos pisos y con corredores, la verdad que me gustaba mucho... se veía muy sólido, asi que cuando supe que se había caído, pues como que no lo podía creer.

Así que no tenía que ir tan lejos como ahora que está en Marina Nacional.


Tenía muy buen sueldo, pues ganaba el triple que en algún otro lugar... en aquel tiempo mil quinientos pesos mensuales era mucho y eso era lo que yo ganaba.


La hora de entrada era a las siete y media de la mañana y salía a las 3 de la tarde... al llegar checaba una tarjeta y a la salida también.


Cuando me daban esos días para trabajar, me entregaban una hora en donde decía a qué departamento iría, cuantos tiempos y a quien suplía.... el departamento que más me gustaba era Ingeniería Civil.   Era un lugar tranquilo y con trabajo pero no como en el que les cuento... aquél se llamaba  Fuerza Motriz.   Recuerdo que allí había un ingeniero que me llevaba una torta todos los días... a la mejor me veía que me faltaba comer o algo así... o simplemente le caía en gracia... nunca me dijo algo fuera de lugar ni nada... cosa que no puedo decir de todos... eso es algo que no me gustaba de Pemex... todos pensaban que podían molestarte, hacerte propuestas o sólo verte con unos ojos libidinosos horribles. 


Un día que llegué un ingeniero me dijo:... fíjese que ayer vi a una niña muy parecida a usted... andaba en patines y tenía una bicicleta a un lado... mmmmm... y le pregunto:  en donde la vio?... y me dice... a un costado del Tribunal de Menores... trágame tierra... claro que era yo... y le contesto... si, era yo... What??? no lo podía creer... como les digo... para ir a trabajar me disfrazaba!!


En aquel entonces seguía viviendo con mi abuelita... también Paco vivía con nosotros, o sea éramos, mi tío Arturo, mi abuelita, Paco  y yo.


Una noche, le digo a mi abuelita... como que el colchón está vencido... pero no era el colchón sino el tambor, que se usaba para poner arriba el colchón... eran de alambre entramado y en las orillas los detenían unos resortes   entonces me dice... mira, en el cuarto de servicio en la azotea, hay unas tablas, tráelas y las pones para que ya no esté tan flojo el colchón... muy bien, fuí,  bajé las tablas y se las puse... tendí la cama y me acosté... a media noche... qué es ésto!!! piquetes por donde quiera, horrible!!  nagüe!!!... algo me está picando!!!... prendo la luz. y nooooooo!!! miles de chinches en aquellas tablas!! aghhhhhhhhhhhh... entonces lo que hice... me fuí a acostar a la sala... y allí he tenido la pesadilla más horrible... en eso llega Arturo y abre la puerta... no me podía ni mover... parecía que el corazón se me iba a salir... hice acopio de fueras, me levanté  y me fuí corriendo con  mi abuelita... me puedo dormir  contigo??? y así pasé esa noche de terror de arriba a abajo!!.


Tuesday, October 16, 2012

MI PRIMER TRABAJO

Y así terminó un año escolar, en el cual obtuve buenas calificaciones.

Pero para entonces, mis papás ya habían regresado de Empalme y todo debido a que no quiso recibir "mordida" para dejar pasar unos furgones de algodón, propiedad de una compañía llamada Anderson Clayton, sin su guía sanitaria  correspondiente.  Y claro, como el hilo se rompe por lo más delgado, corrieron a mi papá...  y llegando a México,  mi tío Alberto le consiguió un puesto en Petróleos Mexicanos, cuyo sueldo no era suficiente para renta y todo lo que se necesitaba para mantener esposa y seis hijos.

Y  dadas las circunstancias, no tuve más que entrar al quite... mi mamá consiguió una máquina de escribir y empezó a dictarme, yo escribía en taquigrafía y lo transcribía a máquina.

Un día, mi mamá me dijo:  ya estás lista para irte a trabajar, lo primero fue disfrazarme, zapatos de tacón y medias!!  

Yo también entré a Pemex, pero de transitoria... llegaba a un salón lleno de gente que quería trabajar y alguien salía y gritaba:... uno de intendencia!! y alguien o algunos  alzaban  la mano y así gritaban según el puesto que estuviera vacante... cuando gritaban:  una taquígrafa!!... yo alzaba la mano y si tenía suerte, me escogían... y ya me decían, para dos días, o tres, o una semana si bien me iba, a veces los contratos eran más largos pero eso si, era para cualquier oficina.

La que no me gustaba era donde trabajaba mi papá... pues había un señor (que por cierto quería ser mi suegro)... que me dictaba cinco horas y tenía que transcribir todo eso en tres.  Además con muchas copias, una amarilla, una azul, una blanca, una rosa, una verde... porque cada una iba a un archivo distinto y todo con papel carbón... acababa con las manos negras... y un error de dedo y había que borrar todo aquello... como diría alguien... ¡¡ era horriiiibleeee !! .

Aquí le dejo y sigo espero mañana.... porque tengo tanto que platicar que más vale que me de prisa :).

15 DE SEPTIEMBRE DE 1954

Hace tiempo traté de entrar nuevamente a mi blog y por más que trataba no podía acceder a él.  Hoy veo con beneplácito que he entrado finalmente :).

Hace tiempo les platicaba de mi estancia en la escuela de comercio Miguel Lerdo de Tejada.   Era bastante grande y me gustaba ir aunque había varios maestros que no deberían serlo pues se mostraban bastante intransigentes y a mi parecer no aptos.

No recuerdo ni cómo pero era parte del coro de la escuela... asi que cante muy bien, pues para nada, pero a la mejor era de las menos peores,  nos enseñaban solfeo y la verdad me gustaba mucho... aprendimos varias canciones, las cantábamos a tres voces, yo estaba en la parte de las "graves".

En ese año 1954... se cumplieron 100 años del Himno Nacional y decidieron cambiarlo de un tono de vals, a uno más marcial, tal como lo escuchamos ahora.  Entonces se optó por invitar a todas las escuelas secundarias, preparatorias y comerciales a tomar parte para el 15 de Septiembre cantarlo en el zócalo.

El director era un maestro Luis Sandi. "Estudió violíncanto y composición en el Conservatorio Nacional de Música de la ciudad de México, plantel del que llegó a ser catedrático y secretario. Dirigió en varias ocasiones la Orquesta Sinfónica de México y la Orquesta Sinfónica Nacional. Dedicó algún tiempo a la composición, de cuya producción destaca su ópera Carlota, hecha sobre el libreto de Francisco Zendejas, y su balllet Bonampak. En 1938 fundó el Coro de Madrigalistas,1 con la finalidad de difundir la música coral en todas sus manifestaciones. Su diario contacto con el Coro lo hizo componer y arreglar una enorme cantidad de obras corales. Es autor de varios libros para uso de los alumnos de música. Sandi fue también miembro del Consejo Internacional de la Música , de la UNESCO , para el período de 1963-1966 y miembro del Comité del Consejo Interamericano de Música."

Para ensayar nos trasladábamos a Chapultepec, éramos muchísimos los que allí nos reuníamos para cada ensayo... el maestro estaba en alto para verlo... cada día, cuando no le parecía que alguna escuela llenaba los requisitos, los sacaba... sacaba a la escuela entera,  no a uno o varios estudiantes que desafinaban.


Asi que para el 15 de Septiembre de 1954... nosotros todavía formábamos parte de aquel numeroso grupo de jóvenes, listos para cantar por primera vez el Himno Nacional... entero con todas sus estrofas... bueno, menos  aquellas que ya le habían quitado donde ensalzaban a López de Santa Anna e Iturbide.


Fue uno de los actos en los que he participado más significativos y emotivos en mi vida.  Todos vestidos de blanco, hasta el maestro... como verán en el video, cantando el Himno Nacional, de verdad que fue una experiencia  que nunca olvidaré... cuando terminamos, las campanas de la Catedral repicaron a todo lo que daban, impresionante!!


En seguida les dejo un video de aquel día... que aunque el Himno no está completo, se ve algo de lo que fue ese día inolvidable. 


Ahora que lo he visto nuevamente, me llenó de emoción.

Este es el himno con sus estrofas originales.

http://www.youtube.com/watch?v=wOJPgu6x1xE&feature=related

Espero pronto volver a escribir, ahora que ya me dejaron :)